Deuda pública aumenta en primer bimestre: Reporte de Hacienda
CIUDAD DE MÉXICO. El Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP), la medida más amplia de la deuda, ascendió a 13 billones 357.3 mil millones de pesos al cierre del primer bimestre de 2022, lo que representó un incremento de 1.8% con respecto al cierre de 2021.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda, el SHRFSP representa el 50% como proporción del Producto Interno Bruto (PIB).
El 66.7% del SHRFSP es deuda interna, con un monto al cierre de febrero de 2022 de 8 billones 905.4 mil millones de pesos, mientras que el 33.3% es deuda externa, con un saldo de 4 billones 451.8 mil millones de pesos.
En tanto, la deuda neta del gobierno federal se ubicó en 10 billones 610.7 mil millones de pesos. El 77.9% se encuentra denominada en moneda nacional y 76.9% de los valores gubernamentales está a tasa fija y a largo plazo.
Analistas financieros estiman que el SHRFSP se incremente en el mediano plazo. El grupo financiero BBVA prevé que la deuda pública aumentará moderadamente en el mediano plazo hasta alcanzar niveles alrededor de 52.5% del PIB en 2026, lo cual contrasta con la meta de reducción que tiene el gobierno federal.
Las estimaciones de BBVA Research apuntan a que el SHRFSP cierre 2022 en un nivel de 50.6% como proporción del PIB, para comenzar su trayectoria ascendente en los siguientes años, con niveles de 51% hasta llegar a los 52.5% que pronostica para el cierre de 2026.
Por su parte, el gobierno federal prevé que el SHRFSP cierre en 49.6% como proporción del PIB este año, de acuerdo con su última estimación dada a conocer en los Precriterios Generales de Política Económica 2023.
De acuerdo con sus estimados y estudios de estrés de la Secretaría de Hacienda, contenido en el Plan Anual de Financiamiento 2022, la deuda continuaría con su trayectoria a la baja hasta el 2026 con un nivel de deuda que represente 43.2% del PIB.
SOSTENIBILIDAD
Para la dependencia, la deuda se mantendrá sostenible en el mediano plazo, gracias a la acción conjunta entre la política de endeudamiento y la estrategia de disciplina fiscal, por lo que no “se espera una trayectoria de deuda explosiva, aun bajo escenarios de estrés, por lo que se concluye que la deuda es sostenible, incluso ante choques adversos”, justifica Hacienda en los Precriterios.
