Un estudio clínico realizado en Reino Unido con la intención de comprobar la eficacia de la dexametasona en pacientes con Covid-19 y la diferencia entre su uso en casos graves que usan respirador y no hospitalizados, encontró que el fármaco es efectivo en el tratamiento y reduce la mortalidad del primer grupo.
Los resultados del estudio, que fueron publicados este 17 de julio, destacan no sólo la funcionalidad del fármaco en pacientes graves, sino las posibles consecuencias negativas en aquellas personas enfermas que no han requerido hospitalización o han tenido sólo síntomas leves.
El estudio observó a 2 mil 104 pacientes hospitalizados que recibieron dosis diarias de seis miligramos de dexametasona hasta por 10 días, y a otros 4 mil 321 que recibieron tratamiento sin dexametasona; 28 días después se hizo una comparación en las tasas de mortalidad.
Los resultados mostraron que entre los pacientes tomaron dexametasona y que requerían el uso de respiradores como apoyo viral, el índice de muertes registrado fue de 29.3%, en comparación con el 41.4% de los que no recibieron dicho medicamento.
De acuerdo con un informe del estudio publicado en el New England Journal of Medicine, los pacientes que recibieron oxigeno con métodos menos invasivos que los respiradores, el beneficio de la dexametasona fue menor e incluso podría considerarse perjudicial, pues el 23.3%, frente a 26.2% de los que no fueron medicados con el esteroide.
La tendencia anterior se acentuó entre los pacientes que no requerían ningún tipo de apoyo de oxigeno y recibieron el medicamento, pues 17.4% de ellos murieron, en comparación con el 14% de quienes no lo hicieron, lo que sugiere que el medicamento aumentó su riesgo de mortalidad.
Por los resultados observados entre pacientes graves o no, los autores de la investigación estimaron que el medicamento es benéfico si se aplica una «dosis correcta, en el momento correcto, en el paciente correcto», pues funciona suprimiendo la respuesta inmunológica anormal que daña los órganos del cuerpo, en lugar de atacar el virus.